Las tensiones de paso y contacto se derivan de la dispersión de la corriente del rayo, conducida hasta tierra por el sistema de protección contra el rayo. La norma UNE 21186:2011 establece una serie de medidas de protección para evitar daños a las personas. En Aplicaciones Tecnológicas somos expertos en protección frente a tormentas eléctricas, ofreciendo servicios y productos avanzados de Smart Lightning que aseguran la protección de personas, equipos y bienes.
Cuando un pararrayos intercepta un rayo, su corriente se conduce hasta tierra, donde tiende a disiparse de forma radial desde el punto de impacto, tanto en superficie como penetrando en el terreno. El paso de corriente genera un gradiente de potencial en el suelo según la resistividad y características de este.
Esta dispersión de la corriente puede causar graves daños, incluso la muerte, por tensión de paso y contacto, en personas y animales que se encuentren en los alrededores del sistema de protección contra el rayo.
Tensiones de paso y de contacto: qué son
Las tensiones de paso se generan cuando existen dos puntos de contacto con el terreno y cada uno de ellos se encuentra a distinto potencial. La diferencia de potencial hace que parte de la corriente circule por el elemento en cuestión, que puede tratarse de una persona o de un animal. La diferencia de potencial en pocos centímetros puede ser muy elevada cuando la corriente del rayo se dispersa en el terreno.
Por otro lado, las tensiones de contacto se producen cuando una parte de una persona o animal se encuentra en contacto con un punto por el que circula la corriente del rayo y también con tierra. De esta forma, parte de la corriente del rayo atraviesa el cuerpo.
En consecuencia, tanto en caso de tensión de paso como de contacto, la persona o animal puede sufrir daño por choque eléctrico. Por eso, los efectos pueden ser devastadores, sobre todo en terrenos con baja resistividad en los que los gradientes de potencial son mucho mayores.
La puesta a tierra de los sistemas de protección contra el rayo se diseña para favorecer la dispersión de la corriente de manera rápida y eficaz, minimizando sobretensiones y corrientes de retorno. Sin embargo, incluso cuando el sistema de protección contra el rayo se instala perfectamente, no se puede evitar un cierto riesgo de tensiones de contacto y de paso para las personas en las inmediaciones.
Medidas de protección contra tensiones de paso y contacto
La Norma Española UNE 21186:2011 se refiere a la protección contra el rayo por medio de pararrayos con dispositivo de cebado (también conocidos por las siglas PDC). En el documento se indican disposiciones de las condiciones mínimas para asegurar una protección estadísticamente eficaz1.
El anexo normativo D de la UNE 21186:2011 trata la protección de las personas contra choques eléctricos producidos por las tensiones paso y de contacto.
La norma considera que el riesgo es bajo (nunca cero, pero sí tolerable) si la probabilidad de que haya personas en el lugar de la bajante cuando hay tormenta es baja, que es lo más habitual. Del mismo modo, considera el riesgo como tolerable si los conductores naturales de la estructura aseguran la continuidad eléctrica (por varias columnas de una estructura metálica o por varios pilares de acero interconectados). Otra condición para un riesgo tolerable es que la resistencia de la capa superficial del suelo, hasta 3 metros de distancia del conductor de bajada, no sea inferior a 100 kΩ, lo que se consigue si en el suelo, sobre la toma de tierra, hay al menos 5 cm de asfalto o 15 cm de grava.
Si el terreno no está asfaltado y se considera alta la probabilidad de que haya personas en la proximidad de la bajante, se debe hacer uso de un cartel para avisar del peligro. Asimismo, se puede colocar un tubo de protección de polietileno reticulado que evite la tensión de contacto, e instalar mallas que equipotencialicen la tierra alrededor de la bajante (3 metros) para prevenir la tensión de paso.
Además, en la norma, el riesgo relacionado con daños a los seres vivos por tensiones de contacto y de paso se considera como un componente dentro del cálculo de riesgo de la estructura.
En el anexo A, la UNE 21186:2011 establece unos valores de probabilidad de que una descarga en la estructura produzca daños a los seres vivos por ambos tipos de tensiones. Los valores de probabilidad contemplan distintos aspectos aportados en el anexo D anteriormente explicado, como el aislamiento eléctrico de los conductores, la equipotencialización del terreno y las señales de aviso.
La probabilidad de daños por tensiones de paso y contacto en los seres vivos se considera despreciable cuando la corriente se reparte entre múltiples caminos (por ejemplo, en una estructura metálica), o bien si se han tomado restricciones físicas.
En Aplicaciones Tecnológicas S.A. disponemos de servicios de Smart Lightning de proyectos de protección contra el rayo, así como de instalación, revisión y mantenimiento. Ofrecemos también los productos tecnológicamente más avanzados en pararrayos inteligentes con dispositivo de cebado DAT CONTROLER® REMOTE, además de conductores y materiales para tomas de tierra. Todas nuestras soluciones siguen las normativas más recientes para evitar los riesgos de tensiones de paso y contacto.
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Referencia
- Asociación Española de Normalización. UNE 21186:2011 Protección contra el rayo: Pararrayos con dispositivo de cebado. (2019).
